Le gusta la danza, el deporte y por sobre todo, las artes circenses. Ésta es la dramática historia de Andrea Véjar, una joven de 13 años que en septiembre del año pasado sufrió un grave caída en su colegio mientras realizaba un taller de circo donde cayó y que la dejó sin caminar.
El accidente ocurrió mientras la menor asistía a un taller extracurricular circense en el Liceo Experimental Manuel de Salas. El pasado 28 de septiembre de 2017, en uno de sus ensayos, la escolar propuso llevar a cabo un truco publicado en YouTube para impresionar en una gala con un movimiento denominado kamikaze que consiste en una caída a máxima altura.
El padre de Andrea, Mario Véjar, sostuvo que este video fue mostrado a su profesora de la clase, Tamara Ortíz, para que autorizara el truco. "La profesora logra asimilar y no dice 'no'. La Andrea sube, se lanza, en ningún momento había una colchoneta".
La menor lo intentó una vez y no le gustó la caída. Volvió a subir a cinco metros de altura. "En ese momento Andrea siente temor, le preguntó a su profesora si se hacía dos nudos de seguridad o uno y ella le dice que uno. Andrea está con un nudo de seguridad y pide que le pongan la colchoneta y la profesora tomó la decisión de no hacerlo porque supuestamente le iba a faltar espacio para su caída", señaló su progenitor.
Según el progenitor, su hija permanecía con miedo y la profesora tampoco estaba segura de que realizara el arriesgado ejercicio. Sin embargo, la instó a realizar de todas maneras la maniobra. "Andrea se revienta la columna contra el suelo y quedó parapléjica".
El accidente y los primeros meses en Chile, significaron millones de pesos en tratamientos. Por esta razón, se trasladó a Barcelona para atenderse. Su madre es española al igual que ella, por lo que Seguridad Social del país europeo cubre todos sus gastos.
Andrea señaló que "voy todos los días, de lunes a viernes, mañana y tarde, de ahí con los otros pacientes intentamos ganar fuerzas y llevar esto". Además, dijo que "espero estar pronto en Chile para retomar mi nueva vida".
En tanto, su padre inició la primera acción legal contra la profesora de 24 años, quien fue formalizada este viernes por el cuasidelito de lesiones graves y gravísimas. La defensa de la profesional, que fue desvinculada del colegio, apunta sus dardos al establecimiento, ya que ningún integrante del recinto fue a mirar el ejercicio que se practicaba en el taller.
Desde el Liceo Experimental Manuel de Salas señalaron a través de un comunicado que la profesora contaba con la experiencia en otras instituciones y que hay un sumario en curso respecto a este hecho. Además, manifestaron que existe una capacitación al cuerpo docente, infraestructura inclusiva y revisión permanente de los protocolos de seguridad.
Sumado a ello, la familia no descarta en segunda instancia presentar una demanda civil contra el liceo. Sin embargo, el primer paso para ellos es responsabilizar a la profesora para compensar el daño causado. "Le diría a Tamara que desde una madurez muy profunda y una toma de conciencia tiene que aceptar que cometió un error muy grave, por un tema de negligencia como familia estamos viviendo un gran dolor", remató el padre de la menor.