Este viernes una nueva falla en el servicio del Metro de Santiago dejó a cientos de miles de sus usuarios sin transporte público.
El cierre parcial de las líneas 1, 2 y 5 generó un caos entre los pasajeros que no tuvieron más alternativa que esperar en las calles otro medio de transporte hacia sus destinos.
La situación no es inédita, pues sólo en este año al menos seis incidentes han causado trastornos en el servicio del tren subterráneo metropolitano.
El domingo 2 de marzo, pasadas las 16.00 horas, un corte de luz generó la evacuación total de los pasajeros de la línea 1, 2 y 5 del Metro.
El inconveniente generó reclamos y atochamientos en los paraderos de Transantiago hasta cerca de las 18.00 horas, hora en que finalmente el servicio fue restablecido.
En abril, los problemas continuaron y el primer martes de ese mes una nueva falla técnica afectó el tramo entre las estaciones Elisa Correa y Las Torres; y a las combinaciones entre las líneas 4A y 5.
El inconveniente ocurrió cerca del mediodía y el servicio fue repuesto media hora después de ocurrido el incidente.
El 13 de agosto se produjo una de las fallas más importantes del año afectó a los usuarios de la línea 4.
Una fisura en uno de los rieles de la estación Quilín provocó el cierre parcial de la línea que esa mañana sólo funcionó entre Plaza Puente Alto, hasta Vicente Valdés, por el sur, y desde Grecia hasta Tobalaba, hacia el norte.
Esto afectó a más de 30 mil usuarios que esperaron casi 24 horas para que se restableciera el servicio que de forma excepcional adelantó el cierre de sus puertas para las 22.00 horas en la línea en cuestión.
Una semana después, el 20 de agosto, los usuarios sufrieron un nuevo inconveniente. Esta vez, el retorno a sus hogares se vio interrumpido para quienes utilizaron la línea 5 por problemas de energización en las vías el servicio fue interrumpido.
La evacuación de miles de pasajeros ocurrió son contratiempos, salvo para aquellos que se encontrabas en las vías de metro que están en altura.
Estas dos fallas provocaron la salida del jefe de mantenimiento de Metro de Santiago y el Sernac comenzó a evaluar medidas para generar compensaciones económicas para los pasajeros.
Luego, solo siete días después, una nueva falla afectó a dos líneas del tren subterráneo.
Un problema en el cierre de puertas de un tren en la estación Las Parcelas de la línea 5 obligó la evacuación de los pasajeros, mientras que la línea 1 un apagón generó molestias entre los usuarios.
El 11 de octubre, un nuevo inconveniente provocó el corte parcial del servicio de la línea 5 a eso de las 12:15 horas y provocó la evacuación de los pasajeros que en ese momento viajaban en el tren. Además, generó el cierre de las estaciones desde Bellavista de La Florida hasta Ñuble.
En esa oportunidad, el servicio fue restablecido en menos de una hora.
En tanto, en su reporte anual del año 2013, Metro de Santiago indicó que las averías totales mayores a cinco minutos disminuyeron en un 26,5% respecto al 2012, pasando de una tasa de 1,89 a 1,39 averías por millón de km.
En tanto, 66% de los incidentes en 2013 fueron causados por averías (causa interna) y el 34% por externos (el 11% de estos fueron por motivos de seguridad).
Línea 4A y línea 5 fueron las que más averías registraron en 2013, con una tasa de 1,75 y 1,70. Sin embargo, fue la línea 2 la que más redujo la tasa de averías en un 44,8% entre 2012 a 20113.
Foto: Agencia Uno