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Disminuye descarga de pornografía infantil en Chile

Según un estudio de la Universidad Católica del Uruguay, el país charrúa ocupa el primer lugar a nivel latinoamericano en descarga de este tipo de contenido, mientras que Chile se ubica en el cuarto puesto.

Karla Gallardo

Martes 9 de abril de 2013

Por medio de un estudio relizado por Omar França y Sergio Delgado -ambos académicos de la Universidad Católica del Uruguay-, se determinó que en Chile hubo una disminución considerable en la descarga de material pornográfico infantil durante el 2012.

La investigación se basa en la tasa de participación en la descarga de material pornográfico infantil online de 10 países latinoamericanos (Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Paraguay, Uruguay y Venezuela) durante el período enero-diciembre de 2011, y enero-agosto de 2012 a través del programa de descargas Ares.

Los resultados arrojan que en nuestro país, por cada 20.000 habitantes con acceso a Internet, 0,91 personas descargaron al menos un archivo con contenido pornográfico infantil durante el 2011, cifra que disminuyó el 2012 a 0,36.

Agrega que durante el 2011 hubo 467 direcciones IPs netas (no duplicadas) que descargaron contenido pornográfico infantil a través del programa Ares, mientras que el 2012 la cifra disminuyó a 186.

Estas cifras ubican a Chile en el cuarto lugar de los países latinoamericanos que más realizan descargas online de pornografía infantil.

URUGUAY A LA CABEZA DE LA LISTA

El estudio Descarga de material pornográfico online en Uruguay, 2011-2012 señala que en Uruguay 2,8 personas de cada 20.000 internautas descargaron material pornográfico durante el 2012, convirtiéndose en el país que más consume este tipo de contenido en Latinoamérica.

Según la investigación, los países que siguen a Uruguay durante el mismo período son Venezuela (0,89); Argentina (0,59); y Chile (0,36.).

Por el contrario, Paraguay (0.09); Colombia (0,11) y Ecuador (0,13) fueron los países que menos descargas realizaron de este tipo de contenido durante el año pasado.

En declaraciones a la prensa, los investigadores señalaron que este estudio es sólo exploratorio y que no recoge todo el universo de programas de descarga de archivos ni otras formas de intercambio de material pornográfico.