El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Haroldo Brito, volvió a referirse este miércoles al cuestionado sistema de nombramiento de cargos de jueces y ministros, así como a la necesidad de modificar el procedimiento.
Para el timonel de la instancia, a raíz de la controversia generada por la fallida nominación de Dobra Lusic a integrar un sillón de la Corte Suprema, incluyendo las presuntas gestiones que habría realizado para el nombramiento de un notario interino, como también las investigaciones contra tres jueces de Rancagua, Brito recalcó que en la opinión pública "se ha entendido la necesidad de generar los mecanismos de nombramiento en general para todos los jueces que sea más objetivo".
En ese marco, el juez Brito sostuvo que "aquí se viene hablando desde mucho tiempo de la necesidad de reducir las brechas de discrecionalidad, de manera que los últimos hechos que han preocupado tanto, tienen un lado positivo que han de alguna manera abierto la posibilidad a generar cambios en el sistema de nombramiento de los jueces, y eso es tremendamente importante".
Añadió que "ahora terminará este proceso con la necesidad de hacer el nombramiento, hay una proposición en mano del Senado y tendrá que resolverse dentro de los plazos habituales".
Por su parte, el ministro de Justicia, Hernán Larraín, se mostró en una línea similar detallando que "nosotros hemos trabajado el cabildeo, esta conversación previa e informal con mucha acuciosidad, pero en los nombramientos que hemos hecho se mostró que el sistema estaba fatigado, y que era mejor que cada institución como la Corte Suprema, el Presidente y el Senado, ejercieran institucionalmente sus funciones y es lo que hemos hecho".
El secretario de Estado agregó que "esperamos que cada uno cumpla responsablemente su forma de trabajar y que elijamos según la trayectoria académica, según la experiencia judicial, según la ética y el comportamiento anterior, según antecedentes objetivos en forma pública, transparente y fundamentalmente meritocrática sin discresionalidad".