Con la Catedral Metropolitana y la Plaza de Armas repleta de gente fueron despedidos los restos del sacerdote Pierre Dubois, en una ceremonia que fue encabezada por el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.
Fueron miles las personas que acompañaron el féretro del querido sacerdote. El recorrido se inició en la Población La Victoria, para luego pasar por Pedro Aguirre Cerda, y terminar en la Catedral.
El recorrido fue el mismo que se hizo el 1984 cuando murió el amigo de Dubois, André Jarlan, quien falleció tras recibir un impacto de bala en su cuello.
Diversas organizaciones sociales, entre ellas la mapuche, acompañaron el féretro del sacerdote conocido por ser un pacifista e impedir que tanquetas de Carabineros ingresaran al lugar símbolo de la oposición a la dictadura del general Augusto Pinochet.
Sus hermanos, Michel y María Teresa Dubois, leyeron unas palabras en francés en donde agradecieron el cariño de los pobladores.
Terminada la ceremonia, los restos del sacerdote fueron trasladados hasta el Cementerio Católico donde serán incinerados, para luego ser depositados en la Parroquia Nuestra Señora de La Victoria, a la cual dedicó gran parte de su vida religiosa.