La semana pasada el Papa Francisco envió una carta a la Conferencia Episcopal en la que reconoce vergüenza y graves errores en la valoración de informaciones respecto a los casos de abusos sexuales cometidos al interior de la Iglesia Católica.
El vocero de la organización Laicos de Osorno, Juan Carlos Claret, se refirió a la reunión entre el Sumo Pontífice y los obispos de nuestro país, además de las víctimas de Fernando Karadima.
Carta del Papa Francisco
En cuanto a las disculpas del Papa Francisco en la misiva, Claret expresó que "en esa carta pasan y no pasan cosas. En primer lugar, dice tres elementos que nosotros valoramos mucho. Primero, la petición del perdón, porque demuestra que hay un cambio en el juicio de él, que esperamos que se convierta en acciones. En segundo lugar, valoramos que amplíe el aspecto sancionable al abuso de poder y manipulación de conciencia. En último término, la frase en la que dice que hay que creerle a las víctimas, que es un tirón de orejas directo al episcopado chileno".
No obstante, para la organización también hay falencias en el documento del Sumo Pontífice, "que principalmente son dos. No llamar las cosas por su nombre, o sea insiste en este discurso de que 'cometieron errores, cometieron pecados' y no, aquí se cometieron delitos. Y en segundo lugar, (esperamos que) las acciones concretas que sean coherentes con este arrepentimiento de Francisco. Hasta ahora solamente tenemos una expectativa, y es por eso que tomamos la carta con mesura. No se ha solucionado el problema de Osorno ni de la iglesia chilena, ni de los obispos".
"Sobre lo que el Papa dice estar arrepentido, lo cierto es que él también tenía la información desde mucho antes. Antes de que llegara el 12 de enero, la Associated Press reveló una carta, reconocida como auténtica por la iglesia chilena, en donde Francisco se dirige al comité permanente de la Conferencia Episcopal, presidida por Ezzati en ese entonces, donde le explica por qué no pudo cumplir el acuerdo que consistía en sacar a Juan Barros", señaló.
"Aquí tenemos un Papa que de su propio puño y letra confiesa saber quién era Barros, su carga moral y las consecuencias que podía tener (...) Yo esperaría que no solamente diga 'a mí me mintieron', porque es verdad, hay gente que se dedicó a desinformar y mentir, pero también esperaría que dijera 'no les creí". Es importante en virtud de los encuentros que anuncia, que se basan en la verdad", añadió.
Obispos chilenos viajarán al Vaticano
Sobre la reunión de los obispos con el Papa Francisco en Roma, Claret destacó que "esperaríamos dos cosas. O que ellos nos digan previamente qué es lo que van a plantearle al Papa, para saber con transparencia en qué posición van; o lisa y llanamente que ellos presenten previamente su renuncia".
"Pensamos en distintas diócesis y no pasa simplemente por cortar cabezas, sino que se necesita un cambio estructural. Pero el primer paso al objetivo concreto en lo inmediato tendría que ser una renovación completa del Episcopado (...) Que vayan a Roma y que luego siga todo igual no tiene sentido", destacó.
Revisa la entrevista completa.