Un niño de 10 años fue abandonado por su madre, quien pretendía viajar desde Santiago hacia Bolivia y al darse cuenta que su hijo no contaba con la autorización para realizar el trayecto lo dejó en el Aeropuerto Arturo Merino Benítez.
La mujer al dejar al menor llamó a un amigo para que lo retirara desde un restaurante del aeropuerto, lo que nunca sucedió. Con el paso de las horas el pequeño comenzó a llorar, lo que quedó registrado en las cámaras de seguridad.
Ante el aviso de los funcionarios del recinto, el departamento de Extranjería de la PDI emitió una alerta, debido a esto durante la escala realizada en Perú.
Mientras tanto el niño fue trasladado a un recinto del Sename, siendo posteriormente retirado por una tía.