Click acá para ir directamente al contenido

ONG que reúne víctimas israelíes y palestinas visita Chile

Jamil Al Qassas y Dana Wegman contaron sus respectivos testimonios durante la semana.

24Horas.cl Tvn

Sábado 22 de octubre de 2016

“La violencia siempre traerá más muertes. Los judíos y los palestinos tenemos que encontrar una solución de vida, que detenga el derramamiento de sangre, la muerte y el conflicto”.

Esta declaración, que parece tan sabia es aún más potente en boca de los integrantes de una organización compuesta por israelíes y palestinos que, pese a perder un ser querido producto de la violencia entre ambos pueblos, en lugar de vengarse o elegir el odio, optaron por trabajar juntos por la paz. Su nombre es Círculo de Parientes- Foro de Familias o PCFF, por su sigla en inglés.

Dos de los 600 familiares que conforman PCFF, viajaron a Chile para demostrar que a pesar de lo complejo y doloroso de esta guerra, que sigue cobrando víctimas, la esperanza de conseguir la paz  sigue viva, aún entre quienes más han perdido.

Tan vivo está ese sueño que el palestino Jamil Al Qassas y la israelí Dana Wegman, ambos integrantes de PCFF, viajaron juntos para compartir con chilenos su experiencia y sus mensajes.

Jamil Al Qassas (45 años) nació en un campo de refugiados en Deheishe, en las afueras de Belén, donde actualmente vive y es miembro del directorio de la ONG ParentsCircle-FamiliesForum y ha participado en múltiples encuentros y actividades por la paz.  

En tanto, Dana Wegman (38 años) es una artista israelí de RamatGan. Activista por la paz y miembro de la ONG ParentsCircle-FamiliesForum y desde 2012 ha trabajado en la organización del campamento para la juventud por la paz y la reconciliación, actividad anual que convoca a jóvenes israelíes y palestinos en torno a temas de paz y entendimiento.  

Sus testimonios, marcados por la pérdida de familiares a culpa de la guerra, se repitieron en foros en universidades, ante diversas personalidades y en el Museo de la Memoria en Chile, durante esta semana.

Esta actividad ha sido organizada como parte de la denominada Semana de la Coexistencia, convocada por la Comunidad Judía de Chile, la Federación de Estudiantes Judíos y el Centro Progresista Meretz.