Con dolor y rabia recibieron la noticia Carolina Figueroa y Benjamín Silva, los padres de la pequeña Emilia.
Ambos estaban presentes en la sala del Centro de Justicia donde fue leída la sentencia, que en su parte resolutiva deja en libertad condicional a Nelson Fariña, el conductor responsable del choque del 20 de enero pasado, que terminó con la vida de la niña un día después.
“Me parece que esta es una justicia indignante”, dijo Carolina Figueroa a la salida del tribunal. ”No hay nada más terrible que saber que el asesino de tu hija, de un ser querido o de un familiar esté gozando en libertad”, dijo la madre al borde de las lágrimas.
“No puede ser que el bien material esté por sobre la vida”, remató la mamá de Emilia.
“Esto es una vergüenza, pero tiene una posibilidad de solución. Necesitamos que se vote la ley Emilia el martes”, dijo por su parte Benjamín Silva, el padre de la niña y uno de los más fuertes impulsores del proyecto de ley que endurece las sanciones a quienes protagonizan accidentes conduciendo en estado de ebriedad.
“Si ustedes quieren, el 18 de septiembre se acaba la impunidad, si quieren terminar con esto, necesitamos un cambio legislativo que tenga sentido de urgencia. Mueren 180 personas por esta causa y todos los autores quedan libres”, insistió Silva, en relación al proyecto de ley que se votará la próxima semana.