Las intensas lluvias que afectaron a Santiago durante los últimos días, se llevaron toda la contaminación del aire, dejándonos una vista espectacular de la ciudad.
La cordillera totalmente nevada, aire puro y fresco, claridad en el paisaje, todo esto es lo que se puede apreciar desde la cima del Cerro San Cristóbal.
Son como postales para el recuerdo.