Este lunes el ministro de Defensa, Jorge Burgos, entregó las conclusiones del informe de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) respecto al millonario robo que se cometió contra un camión de valores al interior del Aeropuerto Arturo Merino Benítez, ocurrido el pasado 12 de agosto.
Según indicó el secretarios de Estado, el fiscal a cargo de la investigación determinó la suspensión del director de aeródromos y servicios aeronáuticos, al jefe de aeropuerto y al jefe de seguridad aeroportuaria a nivel nacional.
El cese de los funcionarios se mantendrá hasta que termine el sumario administrativo o será establecido como permanente, si es que se llegasen a determinar responsabilidades en el denominado "robo del siglo".
Además, Burgos aseveró que "hubo situaciones de relajo en materias de seguridad", fallas que "sin duda, facilitaron la ocurrencia del robo en el interior del aeropuerto".
Una de las conclusiones respecto al documento de la DGAC determina que la entidad es "responsable de no haber ejercido una fiscalización efectiva del cumplimiento de la normativa de seguridad".
El ministro manifestó que ya el 2012 se habían detectado deficiencias en el control de acceso a zonas restringidas, fallas que el día del millonario robo continuaban sin ser subsanadas ni corregidas.
En lo que respecta a los organismo privados, el secretario de Estado explicó que la empresa que realizó el transporte del dinero "no cumplió con el procedimiento reglamentario, ni con las medidas de seguridad propia, ni contó con protección policial", lo que aumentó la vulnerabilidad de la operación.
Foto: Archivo Agencia Uno