El Primer ministro británico, David Cameron, dijo el miércoles en su visita con fines comerciales a India que el diamante gigante que su país tomó a la fuerza en la época de la colonia británica, no será devuelto.
Cameron dijo que el diamante de Kohinoor, de 105 quilates -uno de los más grandes del mundo- y que reposa en la corona de la reina Isabel, permanecerá en Reino Unido.
El mandatario aseguró que él no cree en la "devolvedera" y dijo estar dispuesto a aprovechar el auge económico de India, pero que quiere concentrarse en el presente y futuro más que en el pasado.
Varios ciudadanos indios han exigido durante años al gobierno británico que devuelva el diamante, entre ellos el nieto del líder independiente Mahatma Gandhi.