El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que la organización militante Hamas pagará un "alto precio" por la muerte del niño de cuatro años que falleció este viernes en un ataque de mortero desde Gaza.
Además, Netanyahu ordenó intensificar los ataques a los militantes palestinos en ese territorio.
El niño es el cuarto civil israelí que muere desde que se intensificó el conflicto, a principios de julio.
Más de 2.000 palestinos, casi todos civiles, murieron desde el inicio de la ofensiva.
Por otra parte, este viernes militantes palestinos mataron a tiros a 18 presuntos informantes de Israel.