Una corte francesa dio inicio al juicio contra el autor Gregoire Delacourt, denunciado por difamación por la actriz estadounidense Scarlett Johansson.
La intérprete considera que uno de los personajes de la obra "La premiere chose qu'on regarde" (La primera cosa que miramos) hace un uso fraudulento de su nombre, fama e imagen para obtener un beneficio comercial.
Además de reclamar daños y perjuicios, Johansson quiere que se impida que el libro sea traducido o adaptado al cine.
Para Delacourt el reclamo es "una locura" y su abogado calificó la denuncia de "totalmente escandalosa" por tratarse de un uso literario y no comercial del nombre.