Le rociaron parafina y luego le prendieron fuego, aparentemente por venganza. Melissa Muñoz, de 25 años, permanece internada grave en la Posta Central. Sus vecinos de la Villa Colón de San Bernardo y familiares no dan pistas a la policía de quiénes serian los autores del brutal hecho, pues temen ser los próximos.
Tienen miedo de mostrar sus rostros y contar qué fue lo que sucedió la tarde del viernes cuando Melissa Muñoz Romo fue atacada por un grupo de sujetos, aparentemente menores de edad, que le rociaron combustible y luego le prendieron fuego.
Los vecinos tienen claro quiénes fueron, pero no se atreven a revelarlo, pues están amenazados.
Melissa Muñoz, madre de un niño de 8 años, estaba a punto de llegar a su casa cuando fue atacada. Con su cuerpo en llamas logró subir las escaleras de su domicilio y pedir ayuda.
La única pista que han entregado a la policía es que aparentemente se trataría de un ajuste de cuentas. Pero a tal llega el miedo, que incluso el padre de la víctima no se atreve a revelar o a dar pista de quiénes serian los autores del ataque.
Fueron los mismos vecinos quienes la trasladaron hasta el hospital Barros Luco, donde llegó a la UCI con un 50% de su cuerpo quemado. Los médicos determinaron trasladarla a la Posta Central donde existe un área especialista en quemados. Por ahora, Melissa Muñoz permanece con riesgo vital.