Como "ácida" calificó el Presidente de la República, Sebastián Piñera, la polémica entre los candidatos presidenciales de la UDI, Laurence Golborne, y de RN, Andrés Allamand, quienes se enfrascaron en un duro intercambio de palabras en el marco de la conmemoración del terremoto del 27 de febrero de 2010.
El conflicto comenzó cuando Golborne comunicó que no asistiría a la vigilia en memoria de las víctimas del 27-F en la Isla Orrego, en Constitución, argumentando que no quiere hacer un "aprovechamiento político" de la tragedia.
Frente a eso, Allamand se mostró molesto, cancelando también su participación al evento coorganizado por el "Desafío Levantemos Chile", del fallecido Felipe Cubillos, hermano de su esposa y ex diputada UDI, Marcela Cubillos. De hecho, fue esta última quien alzó la voz, replicando al ex ministro de Obras Públicas que "traspasó un límite" con esas declaraciones.
Evitando polemizar o tomar partido por uno u otro abanderado, el Mandatario expresó en radio Oleajes que "uno de repente encuentra que todos tiene algo de razón".
"Felipe Cubillos se comprometió mucho con la reconstrucción especialmente en las zonas más dañadas (...) Y usted sabe que Andrés Allamand es casado con la hermana de Felipe Cubillos entonces él quería venir, lo había invitado el 'Desafío levantemos Chile' y me parece comprensible", aseveró.
Acto seguido, en tanto, añadió que "yo hablé ayer con el alcalde y decía: yo quiero que esto no tenga tintes políticos entonces, de repente uno encuentra que hay buenas razones en ambos lados".
"Lo que sí creo que la forma en que esto se dio, esta cosa ácida, dura, a mí me entristeció la forma en que se dio este debate. Pudo haber sido de otra manera (...) Espero que este incidente se supere y no empañe lo que fue una conmemoración y recuerdo de algo que no vamos a olvidar nunca", sentenció.