"El programa de gobierno es una carta de navegación, no una camisa de fuerza (...) más vale que nos vayamos acostumbrando a la idea de que la DC, comprometida con el gobierno y con el programa, va a marcar ese matiz, ese punto de vista, ese sello".
Esa fue la frase del timonel de la Democracia Cristiana (DC), Ignacio Walker, que desató la polémica al interior de la Nueva Mayoría, donde se evidenciaron con mayor fuerza las diferencias respecto de la reforma tributaria.
Los dichos de Walker en La Tercera -publicados este fin de semana- generaron molestia en el Partido Socialista (PS) y el Partido Por la Democracia (PPD), la que fue expresada este lunes por sus timoneles al llegar al comité político en La Moneda.
"Me parece que es desafortunado el enfoque que se está dando. Tampoco quiero dramatizar esto, creo que Ignacio (Walker) está tratando de marcar un punto de identidad y de cierto protagonismo que es legitimo en la política, pero que creo que a veces en las declaraciones se cometen errores", declaró el jefe del PS, Osvaldo Andrade.
El diputado socialista recordó que se había llegado a un acuerdo en la Comisión de Hacienda de la Cámara para respaldar el proyecto, instancia donde el Gobierno ingresó unas indicaciones que realizó la DC respecto al rol fiscalizador del Servicio de Impuestos Internos (SII).
La crítica de Andrade, sin embargo, fue más fuerte contra la ministra secretaria general de la Presidencia, Ximena Rincón, quien apoyó a Walker señalando "aquí se usa a la DC para, como se dice, sacar las castañas con la mano del gato, porque los que se oponen a la reforma son los partidarios de la Alianza y no nuestro partido".
"Me parece es que no corresponde que un ministro de Estado, en tanto miembro del gabinete y de confianza de la Presidenta, asuma una representación partidaria en sus dichos. Es como que yo mañana le pidiera al vocero, al compañero Álvaro Elizalde (…) que asuma la representación del partido y empiece a opinar desde esa lógica", señaló Andrade.
En la misma línea, el presidente del PPD, Jaime Quintana, reprochó la actitud del falangismo frente al programa y en particular con el proyecto que cambia el sistema impositivo.
"Yo simplemente hago un llamado a la consecuencia y aquellos compromisos que honramos cuando éramos candidatos tenemos que cumplirlos hoy día que somos Gobierno (...) es legítimo que los partidos quieran potenciar su identidad, pero también llamaría a potenciar la identidad de esta Nueva Mayoría, que comprometió ante el país un programa de gobierno", recalcó Quintana.
La reforma tributaria fue ingresada al Congreso el pasado 31 de marzo y se discute actualmlente en particular actualmente en la Comisión de Hacienda de la Cámara.
Dentro de sus disposiciones, la iniciativa plantea un alza en los impuestos que pagan las empresas de 20% a 25%, la eliminación del Fondo de Utilidad Tributaria (FUT) y la baja en la tasa máxima que pagan las personas, de 40% a 35%, entre otras medidas.