"El proceso judicial en el que están involucrados sus dueños expone al banco (Penta) a riesgo reputacional".
Así lo señaló la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) en una declaración pública emitida frente a la situación procesar de los controladores de Penta, Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín.
Según indicó la entidad, el banco mantiene una sana posición financiera con adecuados niveles de capitalización y liquidez, pero es su reputación la que está en juego.
"Por lo que la SBIF ha implementado un plan de seguimiento permanente de la entidad", dice el documento.
Agrega que Délano y Lavín están actualmente imposibilitados para ejercer cargos en la alta administración del Banco, como ejecutivos o miembros del directorio.
Pese a que la SBIF indicó que la formalización de los accionistas por el llamado Caso Penta no tiene ningún tipo de efecto jurídico en la entidad financiera, saeñaló que "esta Superintendencia considera fundamental que quienes participen en el mercado bancario siempre mantengan una conducta irreprochable".
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