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Senadores rechazan los $193 mil

El Gobierno anunció que presentará un veto aditivo para reponer en el Congreso el monto propuesto como reajuste.

Jorge Miranda

Martes 17 de julio de 2012

A través de un veto presidencial el Gobierno deberá reponer en el Congreso el monto de $193 mil propuesto como salario mínimo, luego que esta tarde el Senado aprobara, por 19 votos a favor y 13 en contra, el proyecto tal como lo despachó la Cámara de Diputados, sin la cifra de reajuste y sólo con un artículo que establece que los recursos saldrán del tesoro público.

La discusión fue precedida por la sesión de la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta donde en votación dividida se rechazaron las indicaciones del Ejecutivo para reponer la cifra de $193 mil de ingreso mínimo y para aumentar en un 8% las asignaciones familiares y el Subsidio Único Familiar, en el marco de las negociaciones para destrabar la tramitación de la iniciativa.

Las intervenciones de los parlamentarios estuvieron marcadas por las diferencias entre el oficialismo y la oposición entorno al monto del reajuste.

"No estamos en una posición inflexible, pero desgraciadamente en esta oportunidad no hemos llegado a un acuerdo", puntualizó el senador Eduardo Frei (DC).

Guido Girardi lamentó que el Gobierno recurra un veto presidencial, al señalar que con esta medida  "se desprecia el rol del parlamento, porque en dos oportunidades la Cámara de Diputados ha rechazado este proyecto, ahora lo va a rechazar el Senado".

Desde el oficialismo Alberto Espina (RN) pidió a los senadores actuar "con liderazgo y responsabilidad". Además, manifestó que "nunca votamos en contra de la propuesta que hicieron los gobiernos de la Concertación".

Por su parte, Jovino Novoa (UDI) señaló que el reajuste propuesto por el Gobierno " es un proyecto que vale la pena considerar", agregando que  "sería un error de este Congreso rechazarlo".

Mientras intervenía el senador Juan Antonio Coloma (UDI) algunos trabajadores se manifestaron en contra de sus argumentos, por lo que el presidente del Senado, Camilo Escalona, ordenó el desalojo de las tribunas y la suspensión de la sesión por cerca de 10 minutos.