Este domingo, el sacerdote Jesuita Felipe Berríos analizó en Estado Nacional Prime, cómo ha afectado a las personas más vulnerables el coronavirus y las medidas que se han tomado por parte de la autoridad, sumado al actuar de la sociedad civil.
Según explicó el sacerdote, hasta antes del decreto de la cuarentena se podía oír bastantes ruidos que correspondían a fiestas en Antofagasta, "era como un día normal", explicó. Sin embargo luego de que se estableciera este periodo, la gente comenzó a quedarse en sus hogares.
Berríos vive en un campamento en el sector alto de la capital regional, en la que según contó es un "campamento con letrinas. No hay agua corriente y no es fácil mantener la distancia social".
Por tal motivo, el sacerdote explicó que están haciendo ensayos de una iniciativa que consiste en una libreta para que la gente pueda comprar en los negocios del barrio y así mantener local. "Cuando uno regala una caja, vienen cosas que no le sirve o la gente la consume de inmediato", indicó.
Es gente que está acostumbrada a vivir en la incertidumbre, si es que uno puede decir que alguien se puede acostumbrar a eso.La pandemia no es el único peligro, viven en constante peligro de enfermedades, de no atención, de pérdidas de trabajo". explicó Berríos, agregando que "la mayoría tiene trabajos informales, la mayoría de ayuda no les llega".
Las medidas del Gobierno
En cuanto a materia política, Berríos valoró la presencia de los ministros de Trabajo, Economía, Interior y hacienda, "le han dado otro aire" al Gobierno debido a un "aire más dialogante", destacando la importancia de la creación de la Mesa Social.
En esa misma línea señaló que no entiende porqué en dicha mesa no se encuentran los profesores o participantes del gremio de los puertos, ya que esta debería integrar todos estos los sectores.
En cuanto a las diferencias políticas que se manifiestan a la hora de debatir las leyes, el sacerdote señaló que para él "el consenso es visto como una debilidad", y que le gustarían "gestos concretos" porque "esto no puede ser solo un esfuerzo del Estado.
"No puede ser que se sigan discutiendo lo de bajarse el salario. No puede ser que la mayoría de los chilenos ganen menos $400 mil pesos al mes y ellos están sobre los millones", agregando que "todos tenemos que dejar de ganar un poco para que ganemos todos".
Desigualdades sociales
Respecto a las desigualdades sociales que existen, el sacerdote expresó que "la explosión social que hubo y las cosas que se decían ahora han quedado expuestas a los ojos de la sociedad, como lo son la violencia contra las mujeres, los niños del Sename, el hacinamiento en las cárceles, la segregación social, las regiones que están dependientes de lo que se diga en Santiago, y no decir sobre el tema económico de gente que vive al día".
De igual forma el clérigo indicó que se puede hablar de "una normalidad" porque reabra el comercio, en especial los malls. "No puede ser que el consumo sea la razón de existir de los chilenos", reflexionó
Por tal motivo, Berríos ve esta pandemia como una oportunidad para "unirnos los chilenos y empezar un trato distinto en la sociedad", y que de existir sería esta gran superación de esta crisis.