El Gobierno se comprometió a no subir el precio de los combustibles en la Región de Magallanes entre 3 a 6 semanas hasta que se logren equiparar los precios de la región con el resto del país.
Luego de casi 40 horas de bloqueos en la Ruta 9 por el alza de los combustibles, autoridades de la región y del gobierno en conjunto con miembros del movimiento que mantienen cerradas las autopistas de la ciudad acordaron solventar los costos del transporte de la gasolina.
En cuanto al impuesto específico, la delegada Presidencial, Jennifer Rojas, aseguró que se trabajará en conjunto a la organización "No Más Alzas" para lograr un mecanismo que permita que la lejanía de la región no afecte el precio.
Al respecto la delegada señaló: "hicimos el compromiso que las personas estaban pidiendo, ellos nos pedían que no existieran alzas de los combustibles hasta que tuviésemos una solución definitiva para la región de Magallanes, lo que hicimos hoy día es comprometer que los combustibles no van a subir hasta que tengamos una solución definitiva en Magallanes, algo que logre equiparar los precios de nuestra región que son más altos por temas de transporte con el resto del país".
Frente a esta decisión, Patricio Acosta, representante de Automovilistas Unidos, indicó: "no nos parece justo que se le dé una solución de parche solo a una región del país, aquí el problema del impuesto específico nos afecta a todos de Arica a Punta Arenas, especialmente a las pymes, la gente que usa el automóvil para trabajar (...) por lo tanto, estas soluciones de parche en una región es pan para hoy día y hambre para mañana, lo que hay que solucionar es el problema de fondo que es el impuesto específico o la eliminación del 50% de este".
Incluso el diputado por la zona y candidato presidencial, Gabriel Boric, reaccionó ante la noticia, señalando: "el proyecto al que hace referencia la Delegada Presidencial, que no ha entregado solución al problema que actualmente se vive en nuestra región, es uno que tenía función solamente durante el periodo de emergencia que ya se acabó. Y que, además, ponía a Magallanes en la misma situación que al resto de las ciudades del país (...) Lo que nosotros hemos propuesto es un subsidio específico para regiones extremas".