Siguen las repercusiones tras la filtración a un medio de comunicación del informe forense del cuerpo de Tomás Bravo, antes de que se hiciera llegar a la familia del menor.
Ante esto, Elisa Martínez, abuela del niño fallecido, dijo que "está demás decir el sentir de la familia porque es un hecho muy delicado, algo muy grave que sucedió y sentimos que hemos sido muy pasados a llevar como familia. No se nos ha respetado nuestro dolor".
De igual forma, agregó que "más encima enterarse por un tema de la prensa, de redes sociales, eso nos dolió, que no nos haya dicho la fiscal o la persona indicada para dar esta información".
Por su parte, Cristian Echaiz, abogado del padre del menor, sentenció que "fue una bomba cuando esta información aparece porque teníamos un protocolo para funcionar con esto y definitivamente el Servicio Médico Legal se salta este protocolo".
En cuanto a lo arrojado por el informe, que determina que la muerte de Tomás fue accidental por hipotermia y deshidratación, el abogado de la madre de Tomás, Pedro Díaz, lo desestimó y afirmó que "hay intervención de terceras personas".
"Eso yo lo he sostenido desde el día uno y esa idea que tenía al principio se ha ido consolidando y hoy día, para mí en particular, es una convicción", sentenció.
En tanto, la fiscalía ordenó a la BIPE de la PDI investigar la filtración de este documento y los abogados querellantes presentaron una denuncia criminal contra el Servicio Médico Legal por el hecho.
Por su parte, la directora regional del SML, instruyó un sumario interno para determinar si hay responsabilidad administrativa en el caso.