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Baleo en casino Monticello: Confirman indemnización de $110 millones para familia de víctima

Corte de Apelaciones confirmó la sentencia de primera instancia, argumentando que el casino no evitó "que personas puedan ingresar con armas de fuego".

24Horas.cl Tvn

© Aton

Martes 16 de marzo de 2021

La Corte de Apelaciones de Rancagua confirmó la sentencia que ordenó a la empresa concesionaria San Francisco Investment S.A pagar una indemnización total de $110.000.000 al padre y hermanos del trabajador del casino Monticello, ubicado en la comuna de San Francisco de Mostazal, quien falleció baleado en julio de 2017 por un cliente que ingresó armado al recinto.

En fallo unánime, la Segunda Sala del tribunal de alzada –integrada por los ministros Marcela de Orúe Ríos, Pedro Caro Romero y el abogado (i) José Irazábal Herrera– rechazó los recursos de apelación de las partes y confirmó la sentencia dictada, por el Segundo Juzgado Civil de Rancagua, que estableció la responsabilidad del casino en el deceso del trabajador.

Según la corte, "la responsabilidad que se atribuye al Casino demandado se sustenta en la culpa infraccional por hecho propio, conforme lo dispuesto en los artículos 2314 y 2329 del Código Civil, en razón de no haber cumplido el deber de cuidado impuesto por la ley, consistente en evitar que personas puedan ingresar con armas de fuego al casino".

En la causa quedó establecido que el 2 de julio de 2017, cerca del mediodía, al interior del casino de juegos Sun Monticello, ubicado en la comuna de San Francisco de Mostazal, el médico veterinario Osvaldo Campos Azócar, cliente del recinto, efectuó disparos con un arma de fuego en uno de los salones de juego.

Producto de los disparos resultaron heridas diferentes personas, falleciendo dos de ellas en el lugar, una de las cuales corresponde a Óscar Reyes Valenzuela, hijo y hermano de los demandantes, respectivamente, quien al momento de los hechos se desempeñaba como ‘Gaming Duty Manager' del casino.

Campos Azócar, un médico veterinario que tenía categoría de cliente Premium del casino, disparó en el sector de las mesas de juegos después de perder una apuesta. El sujeto se atrincheró armado en uno de los baños, donde se inyectó veneno.

La segunda víctima, Carolina de Los Ángeles Carreño Ávila, también empleada del casino, falleció en el Hospital de Granero. Recibió cuatro impactos de proyectil.