Una verdadera travesía es la que realizan a diario los habitantes de la localidad de Llico en la Región de Los Lagos. Durante el invierno deben recurrir a una embarcación para poder conectarse con la ciudad de Fresia debido a que la crecida del río del sector inunda la única vía de conexión con la ciudad más cercana.
Algo que para muchos podría resultar un grave problema, aquí es algo normal. El Llico es un serpenteante río que nace de varios afluentes y que desemboca en el mar a aproximadamente 60 kilómetros al oeste de Fresia. De aguas calmas es ideal para la pesca y actividades recreativas en verano o primavera, pero llegando el mal clima se transforma en el único camino hacia la conectividad.
Desde las primeras e intensas lluvias de otoño hasta las débiles de finales de invierno, el río LLico sube su caudal varios metros en varios sectores dejando aislados a muchos habitantes cercanos a su desembocadura.
Desde muy temprano comienzan los preparativos para abordar la Mari Mar I, única embarcación que cubre el tramo desde LLico a Los Cañones, es casi una hora de navegación entre altos cerros e imponentes paisajes.
La Mari Mar I es subvencionada por el Estado para dar conectividad al lugar por la crecida del río, su itinerario es de tres veces a la semana coordinándose con los microbuses que traen y llevan a los habitantes de un lugar a otro, lo que ocurre sólo una vez al día, por lo cual es importante ser puntual en llegar al improvisado atracadero.
El viaje se vuelve indispensable para llevar alimentos a Llico, (una pequeña aldea con varias cabañas de verano) y traer de vuelta los días domingos a los niños y jóvenes que estudian en el internado de Fresia.
24Horas.cl/con información de Agencia Uno