Este martes, en el Tribunal Oral en lo penal de Cañete, declaró Jorge Escobar Escobar, el tío abuelo de Tomás Bravo, por el juicio en su contra por el delito de abandono con resultado de muerte del menor.
Esta jornada comenzó con un tercer intento ya en esta causa por postergar el inicio del juicio a través de una solicitud, una incidencia patrocinada por uno de los abogados querellantes, lo que fue rechazado finalmente por el mismo tribunal. Fue ahí cuando comenzó la declaración de Jorge Escobar Escobar.
Sobre lo declarado en referencia al punto donde se le pierde el pequeño Tomás Bravo, el tío abuelo declaró: "¿Por qué no bajé con él? Porque era súper peligroso para él era una pendiente pronunciada. Incluso quedó un perrito chico con él. Estaba muy difícil para meterse con un niño, incluso para uno es peligroso. Dónde lo dejé, no corría ningún peligro y yo lo veía a él".
"Dos o tres minutos dejé de mirar a Tomasito y cuando volteo ya no lo veo. Cuando volví a mirarlo para arriba y no estaba le pegué un grito, no respondía. Desapareció totalmente del lugar señor juez. Salí a hablar por celular, con mi sobrina. Le pregunté acaso había llegado Tomasito abajo. Lo busqué, lo llamaba, le gritaba, esperaba para que respondiera, no escuché nada de él", agregó.
Por otra parte, se refirió al momento en que se enteran de la muerte de Tomás: "Fue súper fuerte lo que escuchamos. Pasó media hora, llegaron Los detectives, me dijeron que tenía que dar una declaración en Lebu. Iba en carretera cuando me dicen que yo iba detenido. Los detectives me dijeron que me escondiera en la parte de atrás del auto para que no me vieran".
Además, reveló que el primer fiscal a cargo del caso, José Ortiz, le comentó -al interior de la cárcel de Concepción- que si se declaraba culpable, le rebajaría la condena: "Me dijo que tenía que firmar unos papeles para condenarme. Yo le decía que no iba a firmar nada porque yo no había hecho nada. Te doy 5 años y firme aquí, me dijo. No firmo, porque no soy culpable".
ACLARACIÓN: Cabe mencionar que se trató de una declaración donde no se pudo hacer ningún tipo de registro ni de grabaciones. No obstante, sí se permitió que los periodistas estuvieran al interior con lápiz y papel para tomar nota.
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