La compañía Microsoft, propiedad del magnate Bill Gates, materializó este lunes la compra de las patentes y negocios de telefonía móvil de Nokia por una suma millonaria.
La suma de la venta ascendió a los 5.440 millones de euros, unos 7.170 millones de dólares, y fue concretada por el aún CEO de Microsoft, Steve Ballmer.
En concreto, Microsoft pagará 3.790 millones de euros por la unidad de fabricación de móviles, y 1.650 millones de euros por la cartera de patentes de Nokia.
Ballmer anunció la compra de Nokia, empresa con la que llevan trabajando juntos por largo tiempo, a través de un comunicado que detalla que fueron adquiridos todos los dispositivos de Nokia y servicios comerciales, licencias patentes de Nokia, y la licencia y servicios de mapeo del uso de Nokia.
"Es un gran paso hacia el futuro, acá ganan los empleados, los accionistas y los consumidores de ambas compañías. La combinación de estos grandes equipos juntos acelerará la acción y las ganancias de Microsoft en los teléfonos, y fortalecerá las oportunidades globales de Microsoft y nuestros socios en toda nuestra familia de dispositivos y servicios ", dijo el propio Steve Ballmer, quien aún es CEO de Microsoft.
Las dos multinacionales esperan que la transacción quede completada en el primer trimestre de 2014, después de la aprobación por parte de los reguladores estatales y los accionistas.
"Para Nokia este es un importante paso para reinventarnos y fortalecer nuestra posición financiera e iniciar nuestro siguiente capítulo", indicó en el comunicado conjunto Risto Siilasmaa, el que desde ahora se ha convertido en consejero delegado provisional de Nokia.
La adquisición incluye la transferencia de 32.000 empleados de Nokia a la nómina de la multinacional estadounidense. Empleados que van desde gestión, ingeniería, manufactura, ensamblaje a distribución en todo el mundo.
Nokia fue durante años la empresa líder en producción y venta de móviles, hasta la aparición de los “smartphones”. La compañía informó este año de una caída de la venta de móviles del 27% y unas pérdidas acumuladas en los últimos nueve trimestres de 5.000 millones de euros.
Con esta operación, Microsoft pretende seguir los pasos al otro gigante tecnológico, Google, que compró Motorola en 2011.
El antiguo número uno mundial de la fabricación de celulares, uno de los motores de la economía en Finlandia, concentrará ahora su actividad en los servicios y las redes, una decisión que la compañía ha calificado como “la mejor para que avancen Nokia y sus accionistas”, según palabras de Risto Siilasmaa, que ha pasado a ser el consejero delegado provisional de la empresa.