La vida privada de Britney Spears está en el centro de la polémica nuevamente, luego de que un documental realizado por Daphne Barak cuente con la participación de su exesposo Kevin Federline, su hermano y su padre Jamie Spears, quienes la abordan su actual estado mental.
La responsable del documental asegura haber pasado nueve meses trabajando con todos ellos para ahondar en ello.
Según afirmó Barak en declaraciones al periódico Mail on Sunday, los hijos de la Princesa del Pop, Preston, de 17 años, y Jayden, de 16, se niegan a reunirse con ella, porque aseguran haber visto cómo le entregaban drogas en su casa.
Kevin, por su parte, compartió su preocupación acerca de la posibilidad de que Britney esté consumiendo metanfetaminas y teme que desde su entorno estén encubriendo ese problema: "Es aterrador. Es la madre de mis hijos. Cada vez que suena el teléfono, temo que haya noticias devastadoras. No quiero que los niños se despierten una mañana y descubran que su madre ha tomado una sobredosis".
Horas después de que la historia saliera a la luz, Britney respondió a esos rumores a través de un largo mensaje publicado en su cuenta de Instagram.
"El hecho de que la gente esté afirmando cosas que no son ciertas me resulta tan triste. Puede que ni siquiera sean ellos los que están diciendo esas cosas porque no tiene ningún sentido para mí oírles decir algo así... Que Preston haya dicho: 'Ella necesita escucharnos antes de que sea demasiado tarde'. ¿Recuerdas que cada vez que venías a mi casa, te metías en tu habitación y cerrabas la puerta con llave? Nunca los veía, chicos... Jayden tocaba el piano y hacíamos música juntos... Pero el día que le dije que quería verlos más, nunca los volví a ver", contó.
"Me entristece porque me esforcé tanto por hacer las cosas bien para ustedes y nunca fue suficiente. Así que actúan mis espaldas y hablan mal de mí... Me rompe el corazón", agregó.
A la artista le queda la esperanza de que ni Kevin ni Preston hayan realizado semejantes declaraciones acerca suyo, pero todo apunta a que es cierto.
Britney dejó claro que está harta de que se espere de ella que "haga lo correcto" e ignore las mentiras que lee acerca suyo prácticamente a diario cuando el resto del mundo sí parece tener permitido caer "muy bajo" para arrastrar por el barro su reputación.