Sólo bastaron un par de experimentos para tirar la tesis de James Cameron por la borda.
Tal como lo había anunciado el célebre director de cine, el programa "MythBusters" ("Cazadores de Mitos") comprobó que Jack y Rose, protagonistas de "Titanic", podían salvarse de las gélidas aguas del Ártico tras el naufragio del trasatlántico.
En la película, Leonardo DiCaprio cede su lugar en la tabla de un ropero a su amada -interpretada por Kate Winslet- mientras él queda con medio cuerpo dentro del agua. Finalmente, muere en la espera del rescate.
"Cuando Jack pone a Rose sobre la balsa, luego intenta subirse. No es idiota, no quiere morir, pero la balsa se hunde y casi se da vuelta. Está claro que hay suficiente flotabilidad sólo para una persona, así que decide que sea ella sea la que la aprovecha", dijo Cameron luego que circularan imágenes por Internet, donde se mostraba que había espacio para los dos en la tabla.
En esa entrevista, el director confimó que participaría en el programa donde Adam Savage y Jamie Hyneman comprobaron en primera persona y en el agua que no sólo cabían en una madera de las mismas medidas a la usada en "Titanic", sino que podían flotar si se ataba a ella un salvavidas como el que Rose usaba durante el naufragio.
Los "cazadores" estuvieron flotando sobre la tabla por 63 minutos en el episodio transmitido el domingo en Estados Unidos (ver video). Justo el tiempo que esperó Rose para ser rescatada.
"Creo que la muerte de Jack fue innecesaria", concluyó Hyneman.
Cameron, que estuvo en el capítulo, recibió las pruebas pero cerró también la polémica. A su manera, claro.
"Se olvidan de un punto importante. El guión dice que Jack muere y él tiene que morir. Puede que la embarráramos al no hacer la tabla un poco más pequeña, pero el tipo tenía que hundirse", señaló.
