A veces el concentrarse tanto mirando algún evento deportivo puedo pasar la cuenta.
Es lo que le sucedió al polaco Tomasz Paczkowski, de 43 años de edad, que sufrió quemaduras en la cara después de confundir la plancha con el teléfono móvil e intentar contestar una llamada.
La historia ha dado la vuelta al mundo.
El hombre se quedó a cargo de las labores hogareñas a petición de su esposa. Para amenizar el planchado, el hombre puso el canal de boxeo y abrió una cerveza. Después sonó el teléfono móvil y, distraído por el combate, acercó a su cara la plancha en lugar del celular.
Más tarde, confirmó que la llamada era de su misma esposa que pretendía comprobar si seguía sus instrucciones.
Felizmente las quemaduras no resultaron muy graves, pero Tomasz luce ahora un aparatoso vendaje alrededor de la cara. Declaró a los medios polacos que ha decidido dejar de ver el boxeo mientras plancha.