Los animales no pierden su instinto, aunque estén alejados de la vida salvaje. Eso lo saben todos quienes trabajan como cuidadores y lo experimentó en carne propia el entrenador del parque acuático Sea World, Ken Peters, en Estados Unidos. Si bien el  incidente ocurrió hace seis años sólo ahora se hizo público el  dramático video, en  el juicio que inició el Secretario de Trabajo de Estados Unidos contra Sea World por someter a sus trabajadores a los "caprichos" de estos animales.

La orca Kasatka perdió toda ternura y dejó atrás sus mejores piruetas. En la mitad del espectáculo que reúne a cientos de fanáticos, el animal, en vez de levantar al entrenador, lo tomó del pie y lo sumergió.

Ante la mirada atónita de sus colegas y de los asistentes al show, Peters tuvo que luchar por más de 15 minutos con la orca para que lo soltara, no sin antes ser sumergido en varias ocasiones por largos minutos. Tras liberarse, el entrenador terminó sólo con pequeñas lesiones en su pie.

David Kirby, autor del libro Death in Seaworld, ha tratado de explicar la reacción de Kasatka y aseguró que la agresión pudo responder a que oyó los gritos de sus crías, de dos años, que estaban en una piscina cercana.