La empresa de juguetes, MGA Entreteinment, fabricantes de las populares muñecas Bratz, acusaron a Lady Gaga de incumplimiento de contrato y le exigen que pague 10 millones de dólares por prejuicio.
La empresa asegura que la extrovertida cantante firmó un acuerdo para que fabricaran una muñeca inspirada en ella y por el cual ya habrían desembolsado un millón de dólares.
MGA Entreteinment, informó que le pagaron un millón de dólares por adelantado a la empresa encargada de comercializar la mercancía de Gaga, Bravado International, para poder cumplir cumplir con la fecha de entrega de las muñecas.
El problema es que después del pago, Bravado International se retractó del acuerdo y les informó que habían decido postergar la creación de la muñeca hasta el 2013 y así coincidir con el lanzamiento del nuevo disco de la diva del pop.
Dicha situación habría provocado que MGA perdiera grandes sumas de dinero ya que debieron detener la distribución del producto, que ya había sido solicitado en 10 países.
Según el medio La Voz de América, uno de los representantes de Gaga habría catalogado la demanda como "maligna" y uno de los voceros de Bravado habría asegurado que "la demanda carece de méritos".
El diseño de las muñecas de Lady Gaga incluían un chip de voz con fragmentos de sus canciones, una cabeza desmontable, un moño sangriento y ojos de gato.