La efectividad con la que cumplen sus tareas los perros antinarcóticos le abrió la mente a una monja que luchaba por combatir y terminar con el consumo de estupefacientes al interior de su colegio.
Fue así como la rectora del colegio La Presentación, del municipio de Puente Nacional, en Colombia, consideró que un can entrenado sería una excelente alternativa para frenar el consumo de drogas en su establecimiento.
Con ese propósito en mente, un día la monja rectora decidió acercase hasta los policías locales y pedirles que por favor le regalaran un perro entrenado que la ayudara en su tarea contra las drogas.
Según informa Radio Caracol, la idea de esta particular monja resultó ser todo un éxito. Cada vez que el can ingresaba a las salas de clases descubría cuáles eran las mochilas y los alumnos que portaban drogas.
Así, la monja convirtió su idea en una forma efectiva de combatir el consumo de drogas y el perro, más allá de su tarea antinarcóticos se convirtió en un amigo y guardián de los alumnos del colegio.