Mark Bustos es un peluquero que vive en Nueva York (Estados Unidos). Allí trabaja en una peluquería acomodada, pero cree que un corte de cabello es algo que todos merecen.
Cada domingo, Bustos recorre la ciudad ofreciéndoles comida y un corte de pelo a la gente que no tiene dónde vivir. Según reporta The Huffington Post, el peluquero lleva esta rutina desde el año 2012.
Comenzó cuando viajó a Filipinas para ver a sus familiares. Allí, le pagó al dueño de una peluquería para poder usar su silla en la calle y cortar el pelo a niños que carecían de un hogar.
"El sentimiento fue tan gratificante, que he decidido traer la energía positiva de vuelta a NYC", cuenta el hombre de 30 años. También ha cortado el pelo a gente pobre en Jamaica y Costa Rica.
Mark relata que una vez un receptor del corte se miró al espejo y le dijo: "¿Sabes de alguien que esté contratando?". Se acuerda aún de su nombre (Jemar Banks), y registró el corte a través de su Instagram.
Además de cortar el pelo, Mark visita a las personas con su novia y les ofrece comida. "Incluso una simple sonrisa puede viajar mucho", dice. Mark Bustos registra algunos de sus cortes en su Instagram.
Fotos: Reproducción / Instagram - markbustos.