Un concierto cargado de intensidad, la misma que hace más de 20 años impregnó a buena parte de la generación de los noventa, fue el que protagonizó Rammstein en la segunda edición del festival Rockout que se realizó en el Estadio Santa Laura.
Los alemanes, principales iconos del metal industrial, visitaban por segunda vez nuestro país, luego de su gran presentación en el estadio de La Florida en 2010. Casi seis años después, la fanaticada incondicional se duplicó. 30 mil fanáticos corearon y disfrutaron del espectáculo musical y pirotécnico preparado.
Cuando el reloj marcó las 21.29, un cronómetro comenzó la cuenta regresiva, para el espectáculo de cierre para la segunda versión del Rockout, esta vez emplazado en el Estadio Santa Laura y que también tuvo a bandas como The Offspring y Meshuggah, entre otros.
Las luces se apagaron y la cortina cayó exactamente a las 21.30 horas, dando inicio a casi dos horas de música, pirotecnia y fuego. Claro, porque los alemanes son los especialistas en ofrecer en sus conciertos espectáculos en que el fuego es uno de sus principales invitados.
Rama 4 fue el tema con que abrieron la noche, donde el público agolpado en la cancha, coreaba cada una de las 18 canciones que interpretaron. Con un sonido potente, atronador, mezclado con escenas teatrales para cada tema, lo visto anoche en el Santa Laura, se encuadra entre los mejores espectáculos de lo que va de este 2016.
Entre los temas que tocaron estuvieron, Reise, Reise; Hallelujah; Zerstören; KeineLust; Feuerfrei!; Ichwill, el clásico Du hast; Amerika; Engel; para cerrar la noche con Te quiero puta!
Con un show de gran factura, la segunda presentación de Rammstein en Chile quedará guardada en la retina de los 30 mil fanáticos que repletaron el recinto Plaza Chacabuco, en una jornada llena de rock.