Poco queda para que demos inicio formal a las celebraciones de las Fiestas Patrias, fecha en la que desde la educación básica no enseñan a conmemorar la independencia de Chile.
No obstante, ¿por qué se recuerda al 18 de septiembre de 1810 si, en teoría, la independencia se concretó casi una década después?
La razón se debe a que, básicamente, los habitantes de aquella época comenzaron a celebrar desde un principio las fiestas nacionales gracias a la Primera Junta Nacional de Gobierno que se produjo el 18 de septiembre de 1810, por lo que a pesar de la aparición de sucesos importantes posteriormente, siempre se recordó el suceso que dio inicio al proceso.
PARA ENTENDER: DEL DOMINIO ESPAÑOL A LA INDEPENDENCIA
Luego de siglos bajo el amparo ibérico, los ciudadanos chilenos de aquella época vivieron un proceso clave en la historia internacional e internacional.
Teniendo como antecedentes históricos, entre otros, a la Revolución Francesa, Independencia de Estados Unidos y la Ilustración, los criollos de principios del siglo XIX aprovecharon el cautiverio sufrido por el Rey español Fernando VII a manos del emperador Napoléon Bonaparte.
Como la 'cabeza' de la Corona no estaba, se comenzó a consolidar un fenómeno en América de tomar el poder 'mientras el rey no estuviese en el cargo'.
Así, se organizó la Primera Junta Nacional de Gobierno el 18 de septiembre de 1810, instancia que permitió delinear los primeros atisbos de emancipación junto al devenir en el futuro cercano.
Sin embargo, por la vuelta del control hispánico en tierras nacionales -proceso conocido como Reconquista- surgieron nuevas trabas para conseguir la separación definitiva.
Ese momento recién se empezaría a consolidar luego del triunfo chileno en Chacabuco en 1817, para luego firmar el Acta de Independencia el 12 de febrero de 1818. Pero el proceso militar se consumó definitivamente el 5 de abril de 1818, cuando las tropas independistas se impusieron en la Batalla de Maipú.