Un grupo de perros le dejó un muy mal recuerdo a un automovilista en Turquía.
Las cámaras de seguridad captaron cómo la jauría se organizó para lograr atrapar a un solitario gato. Como una forma de "facilitar" la búsqueda del felino, comenzaron a destruir el auto, tanto así que incluso uno de ellos arrancó el parachoques con sus dientes e ingresó al auto por el motor.
Mientras algunos se encargaron de sacar completamente el parachoques, otros se dedicaron a roer los neumáticos. El resto se metió bajo el capó para continuar con la búsqueda.
A pesar de que el auto quedó evidentemente destruido, no lograron su cometido y el felino nunca apareció.