Luego 27 años trabajando en una cadena de comida rápida, un hombre renunció y, a modo de despedida, la empresa le regaló una bolsa de dulces.
Esta fue la historia de Kevin Ford, un cocinero de 54 años que tras cerca de tres décadas en el establecimiento de Burger King ubicado en el aeropuerto de Las Vegas, Estados Unidos, y sin faltar un solo día, se llevó una decepción.
La situación fue capturada en video y rápidamente se viralizó en las redes sociales, donde muestra el regalo que consistía en una bolsa de plástico con algunos chocolates, caramelos de frutas, una entrada al cine, un vaso y dos lápices.
Sin embargo, el trabajador no tuvo más que palabras de agradecimiento hacia el local: "La empresa me envió un montón de cosas. Estoy feliz por cualquier cosa (...) no soy ese tipo de persona".
Ante la situación, la compañía respondió formalmente: “El franquiciado ofrece a sus miembros del equipo un sólido programa de reconocimiento de los empleados, que incluye el reconocimiento de los hitos de permanencia y premios monetarios”.
Pero a causa del mal momento, una de sus hijas, indignada por la situación, creó una cuenta en GoFundMe, la plataforma de financiamiento colectivo. Una historia que no demoró en ser apoyada por las personas logrando recaudar cerca de $159.000 dólares, lo que equivale a cerca de 145 millones de pesos chilenos aproximadamente.
El video incluso llegó hasta Hollywood, donde el comediante americado David Spade, se hizo participe de la campaña y donó $5.000 dólares.
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