Es sabido que los autos deportivos no son necesariamente los más cómodos del mundo, ya que por lo general son bastante pequeños.
Así lo comprobó un chofer de estacionamiento quien simplemente era demasiado corpulento para el Lamborghini Aventator.
Cuando intentó ingresar al vehículo, luego que su dueño se lo dejara, el hombre intentó varias veces acomodarse para estacionarlo, pero no le quedó mas que darse por vencido.
Revisa la divertida secuencia a continuación:
Chofer de estacionamiento no consigue entrar a un Lamborghini
Chofer de estacionamiento no consigue entrar a un Lamborghini
El pequeño tamaño del superauto le jugó una mala pasada a un sujeto quien no consiguió ingresar al vehículo.
Foto: Reproducción / YouTube