Desde hace un tiempo, parece demostrado que nada de los que ocurre en las carreteras de Rusia puede sorprendernos.
Sin embargo, el último video llegado de esa factoría interminable de grabaciones insólitas vuelve a dejar bastantes bocas abiertas.
En esta ocasión, unos amigos conducían como cualquier día sin ninguna novedad aparente. Pero el panorama cambió radicalmente cuando a un costado de la vía apareció un Audi que llevaba a un animal muy peculiar con la cabeza afuera.
Lógico pensar que se trataba de un gran perro, pero su sorpresa fue mayúscula cuando descubrieron que quien viajaba de copiloto era nada menos que un gran felino, un leopardo para ser más exactos.
El salvaje animal, aparentemente reconvertido en "gatito doméstico", parecía disfrutar del viaje con buen humor y ni siquiera parecía inmutarse ante la expectación que de seguro provocó a más de una persona.