El Hospital Miguel Servet de Zaragoza, España, decidió poner televisores al interior de sus recintos donde los niños deben someterse a radioterapia.
Segín explicaron desde la Asociación de Padres de Niños con cáncer de Aragón (Aspanoa), la idea es que los pequeños pacientes se entretengan mientras reciben sus sesiones, ayudando así a reducir el estrés que esto puede provocar.
"Tienen que quedarse solos y quietos durante casi media hora en una sala muy grande y en la que hace frío, sin poder estar en compañía de sus padres o de cualquier otra persona adulta", explicaron desde Aspanoa.