Un gato de tres años que fue bautizado como Vincent volvió a pararse sobre sus patas traseras gracias a unas prótesis de titanio hechas especialmente para él.
Las nuevas patas del felino tienen también piezas elaboradas en una impresora 3D y fueron colocadas directamente en sus huesos.
La doctora Sarah Bergh de la Universidad del Estado de Iowa, fue quien encontró a Vincent y se propuso devolverle la capacidad de caminar junto a la compañía BioMedtrix.
Aunque no se conocen las causas de las pérdida de las patas de Vincent la simetría de las extremidades hizo posible diseñarle sus prótesis.
A partir de ahora la rehabilitación de Vincent se llevará a cabo en paralelo con el desarrollo de complementos que permitirán que vayan adoptando una forma parecida a las de una pata felina real, comentó la doctora Bergh a Discovery News.
"Vincent va a saltar y hacer las cosas que hace un gato normal muy pronto", aseguró Bergh.