A trece años del ataque de Al Qaeda a las Torres Gemelas, en Estados Unidos, una de las últimas perras rescatistas que participó en las labores de ayuda, volvió a la Zona Cero por primera vez.
Allí participó junto a su dueña del homenaje a los fallecidos, y se sentó en el mismo lugar que hace años recorrió en busca de sobrevivientes.
Bretagne es una labradora de 15 años que fue parte de la primera ola de equipos que ayudaron a las personas atrapadas bajo los escombros de los edificios del World Trade Center.
La dueña de Bretagne, Denise Corliss, cuenta que en septiembre del 2001 viajaron desde Texas a Nueva York para ayudar.
Corliss contó en una entrevista del show Today que la experiencia fue distinta a lo que esperaban: "Yo de verdad creía que podíamos encontrar a alguien -cualquier persona- si sólo pudiéramos llegar al lugar correcto. Pero nuestra realidad era muy distinta: Encontramos restos, algunos reconocibles, otros no mucho", relató.
Pero el rol de Bretagne cambió en terreno y llegó a ser de tipo terapéutico: la gente se acercaba a ella y al acariciarla contaban sus historias, desahogándose.
La can rescatista no sólo participó en ese desastre, sino que también ayudó en Nueva Orleans (Estados Unidos), luego de que el huracán Katrina provocara inundaciones el año 2005.
A los nueve años se retiró y comenzó a trabajar en un centro que ayuda a niños con necesidades especiales a aprender a leer en voz alta. Bretagne les ayuda a ganar confianza "escuchándolos" atentamente.
En la actualidad, la perrita está nominada al premio "Perro héroe" que entrega la American Humane Association.
En los ataques a las torres gemelas, perpetrados el 11 de septiembre de 2001 y que motivaron la invasión de Estados Unidos a Afganistán, murieron casi tres mil personas.
Fotos: Reproducción