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Red eléctrica en el fondo del mar

Científicos daneses descubren que forman una especie de gigantesco tendido eléctrico para sobrevivir entre las distintas capas de los barros marinos.

Felipe Moreno

Jueves 25 de octubre de 2012

Los primeros indicios relevantes se produjeron hace casi tres años, cuando investigadores daneses descubrieron una enorme red de corriente eléctrica existente en el fondo del mar.

Sin embargo, en aquel momento no estaba claro aún por qué se originaba tal red, por lo que el descubrimiento se mantuvo oculto todo este tiempo hasta este mes, cuando los investigadores de la Universidad de Aarhus dieron por fin con la causa.

El proceso tiene lugar dentro de las bacterias Filamentous Deltaproteobacteria, que, en efecto, son conductoras de electricidad. Juntas constituyen un impresionante tendido eléctrico vivo que puede transferir electrones a un centímetro de distancia. Puede parecer poca distancia, pero si se tiene que cuenta que el tamaño se extiende a mas de 10.000 veces su propia longitud, es una distancia considerable.

El descubrimiento partió hace unos años, cuando investigadores buscaban tomar muestras de barro del fondo marino en las costas de Dinamarca, en el Océano Glacial Ártico. Al momento de tomar las muestras científicas, se dieron cuenta de que entre los procesos biológicos se producían pequeñas corrientes eléctricas.

"Nuestros experimentos mostraron que las conexiones eléctricas en el fondo marino deben ser estructuras sólidas construidas por las bacterias", dice uno de los investigadores, Christian Pfeffer.

En los microscopios, los científicos encontraron tipos de largas bacterias multicelulares hasta ahora desconocidas que permanecieron siempre presentes cuando se medían las corrientes eléctricas. "La increíble idea de que estas bacterias forman un tendido eléctrico realmente surgió cuando, dentro de ellas, descubrimos cuerdas como cables delimitadas por una membrana", aclara el investigador Nils Risgaard-Petersen.

Si bien, las bacterias sólo ocupan un metro cuadrado del fondo del mar y su tamaño es más delgado que un cabello, su extensión daría para hacer cableados eléctricos de miles de kilómetros.

El principal motivo de la transferencia de los electrones es la supervivencia de la bacteria. Se espera también que el descubrimiento sirva para obtener nuevos tipos de productos electrónicos y mejorías en materia energética, según explicó ABC.es.