Un estudio realizado por la Universidad de Yale indicó que las horas de sedentarismo en el colegio incide directamente en la obesidad infantil.
El documento arrojó que los niños pasan el 50% del día sentados, por lo que propone que las clases se realicen de pie para que los escolares se mantengan activos.
"Aunque es difícil reducir el tiempo en que están sentados para comer o llegar a la escuela, cambiar el ambiente de la clase para que pasen más tiempo en pie puede ayudar", señaló Karl Minges, autor de la investigación.
La muestra
El estudio fue realizado con 337 participantes, de entre ocho y 12 años, que utilizaron mesas más altas para estar de pie en clases.
La investigación descubrió que los niños que no se sentaban, después de clases seguían más activos y continuaban de pie en las siguientes asignaturas.
Minges destacó que reducir el sedentarismo en los niños ayudaría a disminuir problemas de obesidad y diabetes.