Y al tercer día resucitó.
"Yutu ha vuelto a la vida", según anunció el portavoz del proyecto lunar de la Agencia Espacial China. Tres días después de que finalizara la noche lunar, el rover chino de exploración lunar se ha puesto en contacto inesperadamente al control en la Tierra, para anunciar que ha despertado de su hibernación.
Unos problemas técnicos habían puesto en duda su funcionamiento y hasta la Agencia Espacial China había enviado un comunicado anunciando de manera oficial el fin de su misión. Según han explicado los expertos, ahora "están trabajando para verificar las causas de los fallos mecánicos hallados hace unas semanas" y "poner en marcha el plan de reparación".
Yutu ha sobrevivido a su segunda noche lunar (que dura 14 días terrestres), durante la que permanece en estado de hibernación. Los expertos dudaban de su despertar tras observar como uno de sus paneles solares no se plegaba correctamente y quedaba a merced de las frías temperaturas que se alcanzan durante la noche en nuestro satélite. Temperaturas de alrededor de los -180ºC.
Pero a pesar de las fallas detectadas, estas no han sido suficientes para acabar con la vida del vehículo, que ha tenido a los técnicos en vilo durante tres días. Yutu va a poder terminar con su misión, que está previsto que dure hasta el mes de abril.
Yutu, dotado de cámaras y un brazo articulado para llevar a cabo excavaciones, tenía previsto examinar la geología lunar y buscar recursos naturales durante tres meses.