Aquellas personas que gustan de ver películas dramáticas y llorar en el cine gustarán de los resultados de un nuevo estudio que concluyó que llorar en las películas provoca un cambio en el estado de ánimo de las personas.
La investigación, realizada por expertos de la Universidad de Tillburg en Holanda, constó de entrevistas de 60 voluntarios que fueron filmados mientras veían dos películas: Hachiko y La Vida es Bella.
Los participantes fueron evaluados en función de su actitud durante la cinta y se les preguntó cómo se sentían después de ver las cintas en distintos intervalos de tiempo.
Casi el 60% de los encuestados lloraron al ver la película "Hachiko", que narra cómo un perro se mantiene leal a su dueño incluso después de que éste muere.
"La Vida es Bella", por otro lado, sólo gatilló lágrimas en el 45% de quienes miraban. Entre las estadísticas logradas, se concluyó que las mujeres lo hacían más que los hombres.
Pero los cuestionarios entregaron los resultados más interesantes: aquellos que no lloraron sintieron que su estado de ánimo se mantuvo durante toda la película y varias horas después.
Aquellos que dejaron caer lágrimas reportaron sentirse más tristes al final de la película, pero al cabo de 20 minutos su humor volvía a subir.
Una hora después de llorar, los voluntarios dijeron sentirse mejor que nunca.
El estudio fue publicado en la revista científica Motivation and Emotion, y los investigadores intentaron explicar los resultados indicando que el llorar produce cambios químicos en el cerebro.
El investigador Asmir Gracanin, de la Universidad de Tillburg, explicó que llorar podría gatillar la entrega de oxitocina, un químico relacionado al sentimiento de bienestar, en el cerebro.
Foto: Reuters / Referencial.