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¿Problemas para madrugar? Las cinco claves para poder levantarse temprano

Con estos consejos podrás salir de la cama sin mayores complicaciones cada mañana.

24Horas.cl Tvn

Domingo 23 de octubre de 2016

Un nuevo proyecto de Kickstarter, denominado "Domina tus mañanas", tiene la finalidad de dar consejos a todas aquellas personas que tengan dificultad para levantarse pronto de la cama y así convertirlas en "personas matutinas".

Según esto, sólo se deben seguir cinco "simples y fáciles" pasos para poder realizarlo:

1. Entender algunas interrogantes

La interrogante más importante que uno debe plantearse para ser un madrugador es ¿por qué quieres levantarte pronto? Además, se recomienda realizarse estas preguntas:

  • ¿Quiero cambiar en mi vida?, ¿y cómo puede ayudarme en ello el tomarme un tiempo para mí cada mañana?
  • ¿A qué metas de vida no le estoy dando cabida y cómo puedo contribuir a ellas con un poco de tiempo cada mañana?
  • ¿Qué es lo que me está privando de levantarme pronto y cómo puedo contrarrestar sus consecuencias negativas?

 

2. Planificar tu rutina la noche anterior

Para poder realizar la transición a levantarse más temprano, se recomienda no tener grandes decisiones que tomar en las mañanas. En vez de escoger opciones innecesarias al momento de levantarse, es mejor tomarlas la noche anterior.

Así puedes tener tus cosas alistadas para el día siguiente, como tu ropa, tu desayuno y tus tareas mañaneras.

 

3. Acostarse temprano

Si no se descansa lo necesario costará más levantarse rápido y enérgicamente. Pero, ¿cuánto tiempo es necesario para descansar el cuerpo? Según la Fundación del Sueño de Estados Unidos, un adulto que tiene entre 26 y 64 años debe tiene la necesidad de dormir entre siete y nueve horas diarias.

Ir a la cama temprano también es determinante, ya que así podrás acondicionar a tu cuerpo a levantarse a una hora determinada.

4. Tener una motivación para levantarse

Para tener las ganas de salir temprano de la cama, es necesario querer hacer algo determinado en la mañana: ir al gimnasio, desayunar en familia, realizar trámites o ir de compras pueden ser algunos ejemplos.

Si no tenemos un propósito, será inevitable pensar "¿para qué me levanto a esta hora si no tengo nada que hacer?".

5. Mantener la motivación

En ocasiones, lo que mayor dificultad presenta es tener una constancia, porque nuestro cuerpo nos grita que volvamos a la vieja rutina. Para tener este compromiso, es necesario estar motivado y tener un recordatorio de por qué hemos tomado la decisión de comenzar a madrugar.

Se debe ser consciente de lo que se pretende lograr. Quizá contarle a tu familia y amigos del cambio que quieres realizar puede implicar una promesa que te motive a cumplir.