Se trata de una galaxia “far, far away”, como diría George Lucas. Quizás la más lejana que exista, o al menos, según la NASA, la más lejana del universo conocido.
Está tan alejada de nuestro planeta, que cuando emitió la luz que ahora llega a la Tierra, el universo sólo tenía unos 380 millones de años. (Se estima que ahora tiene unos 13.700 millones, tras el Big Ban).
Esta galaxia fue descubierta llevando al límite las capacidades del veterano telescopio espacial Hubble. Los astrónomos necesitaron de seis semanas de observaciones para determinar su existencia.
En total fueron halladas seis nuevas galaxias lejanas y confirmado la existencia de otra conocida previamente. El objetivo de las investigaciones era explorar la historia del universo y determinar cómo de rápidamente aumentó el número de galaxias al principio. Los resultados obtenidos indican las galaxias se formaron poco a poco y no repentinamente, como sostienen algunas hipótesis.
Las imágenes obtenidas ofrecen la visión más lejana, o profunda, hasta ahora del universo, que formarían parte del "universo primitivo", por su distancia y su edad.
