En noviembre un profesor fue brutalmente golpeado por su propio alumno, cuando le informaron que iba a repetir de curso. El docente habló en exclusiva con 24 Horas. Dice que tiene miedo y debe someterse a múltiples operaciones. El agresor de 18 años no ha sido ubicado para su formalización.
Se trata de Miguel Miño, quien fue golpeado con puños y patadas tras citar al alumno junto a su apoderada para informarle que estaba en riesgo de repetir de curso producto de su insistencia.
En ese momento comenzó la agresión, "fue un golpe fuerte en la cara, en ese momento sentí que la mandíbula no estaba en su lugar, abrí los ojos y estaba empapado de sangre", recordó el docente.
Las patadas en el suelo y en su cara le provocaron fracturas, dislocación de mandíbula, operaciones hasta la actualidad y 15 días hospitalizado. Este miércoles debía ser la formalización del agresor, pero no fue notificado. Cuando lo golpeó aún era menor de edad, pero ya tiene 18 años.
El profesor mencionó que tras la brutal agresión "el alumno sale del salón de reuniones y la mamá sale detrás 'arrancandose'".
Miguel reconoció que estaba habituado a los insultos y faltas de respeto, incluso a los empujones, pero jamás a los golpes, "en un momento determinado yo me apagué y si no hubiera regresado mi familia hubiera quedado sin un papá, sin su esposo".
Asimismo, considera que el colegio no es un lugar seguro para trabajar: "Lamentablemente eso se ha normalizado, te insultan (...) el colegio es una especie de lugar el cual era seguro cuando tú vas, pero ahora entra uno al colegio y no sabe si va a salir con vida".