La Policía de Investigaciones (PDI) detuvo a tres personas que operaban una farmacia ilegal en San Ramón, en la Región Metropolitana. Según detectives de la Brigada de Delitos Contra la Salud Pública y el Medio Ambiente (Bridesma) los detenidos vendían medicamentos al por mayor.
Pero el local no tenía la autorización del Instituto de Salud Pública (ISP) y tampoco cumplía con los requisitos para funcionar. Por este motivo, el recinto fue clausurado por las autoridades. En el procedimiento se encontraron medicamentos avaluados en $80 millones.
Entre los detenidos, todos de nacionalidad chilena, dos quedaron con medida cautelar de prisión preventiva y otro con arraigo nacional.
Luis Mardones Olivares, prefecto jefe de la Bridesma Metropolitana detalló que las personas detenidas "vendían los productos por mayor. Es de público conocimiento que en las ferias libres se vende mucho medicamento en puestos ambulantes, lo que obviamente va en contra y vulnera la salud pública ya que todos esos medicamentes tienen que tener cierta temperatura, estar embalados, y muchos de los que se incautaron están vencidos, entonces obviamente la gente va por un beneficio y finalmente es perjudicada. Se hace atractivo porque el valor de venta es menor".
El policía agregó que en la oferta de la farmacia ilegal también había medicamentos restringidos. "También encontramos medicamentos que sólo se venden bajo receta médica y que infringen la ley 20 mil, como el Tramadol y la Fermentina, que fueron cerca de cinco mil dosis que fueron incautadas", agregó.
Las autoridades informaron que se incautó un total de medio millón de dosis.